En una vivienda los mayores devoradores de energía son la lavadora y el frigorífico, los cuales condicionarán el dimensionado de la instalación fotovoltaica ( nº de paneles y baterías), y por tanto el coste de la misma.
Podemos reducir enormemente el consumo eligiendo aparatos de la más alta eficiencia posible que ahora va ya por la calificación A+++, por ejemplo:
Si optamos por un frigorífico bajoencimera normal tipo camping como el Haier hr 135-a de unos 100l de capacidad y clase energética "B" tendremos un consumo anual de unos 182 kw/h. 139 euros.
Si optamos por la opción Liebherr tp1720-21 de unos 147 litros y clase A+++ tendremos un consumo anual de 63kw/h con un precio de 399 euros.
Caer en la tentación del precio inicial es muy frecuente, pero también un error garrafal que supondrá un sobrecosto en la instalación fotovoltáica, en la reducción de la vida de las baterías,etc.
En el caso de la lavadora, el problema esta en calentar el agua de lavado, porque solo para girar la ropa se invierte muy poca energía, por lo cual la opción mas sensata es optar por un modelo bitérmico ( la máquina tiene dos tomas de agua, una fría y otra caliente); y conectarla directamente al agua caliente solar de la casa que nos sale gratis casi todo el año si vives en un país soleado como España.
Con estas dos medidas y luces de tecnología led podemos mantener nuestro consumo tan reducido que el coste de la instalación autónoma sea perfectamente viable.
El precio de los paneles solares ha bajado mucho en los úlmimos años, y ya puedes adquirir lotes por menos de 1euroW pico si te organizas en grupos de compra conjunta.
EL problema sigue estando en la acumulación: las baterías son caras, contaminantes y duran pocos años; por lo que la opción lógica cuando tienes linea eléctrica es el BALANCE NETO,, opción de usar la red nacional como batería, que es viable hace años en muchos países, pero que los políticos corruptos de España están bloqueando.
Si vivimos en una zona de inviernos fríos, lo más sensato es calentar la casa con leña.
En muchos pueblos, los ayuntamientos ofrecen la posibilidad de limpiar un lote de monte público a cambio de la leña y eso es lo que vengo haciendo varios años en invierno: preparar la leña del año siguiente.
Es un trabajo duro y con cierto peligro al trabajar todo el día en fuertes pendientes y con una motosierra en la mano, pero vale la pena el esfuerzo, sobre todo en la situación actual de paro generalizado...
Junto con éstas medidas, tener un huerto ecológico al lado de casa, y construir con tierra cruda ( tapial), el conjunto del proyecto vital tiene un impacto ambiental mínimo ( huella ecológica), y por tanto se consigue una autosuficiencia energética y alimentaria muy interesante en los tiempos que corren...
Tan solo queda hablar de una parte primordial que es donde, y con quien hacer algo así; y es que no recomiendo embarcarse en una aventura de éste tipo en solitario, es mucho más eficiente hacerlo en pequeños grupos intencionales ( que comparten los mismos fines y la misma filosofía de vida ), que se apoyen mutuamente tanto en los esfuerzos físicos como en los económicos.
Una herramienta muy útil para todo el proceso es la tecnología intermedia o apropiada, que consiste en identificar correctamente tus necesidades y dimensionar adecuadamente tus máquinas y herramientas.
Gran parte del encanto de éste tema está en que podemos hacer nosotros mismos nuestras herramientas con los materiales que tenemos a nuestro alcance, como por ejemplo la cocina calefactora, la azada de rueda para el huerto, sembradoras, bombas de agua , sierras, etc.
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