martes, 14 de octubre de 2014

Otoño, época de setas...

Como todos los años, se termina el verano, época anhelada de calor que nos anima a salir de nuestras madrigueras y disfrutar del sol y del tiempo libre... y llega el otoño con la vuelta al trabajo, al cole... es como si se nos terminase la libertad condicional y tuviésemos que regresar a la cárcel, autoimpuesta, si, pero cárcel al fin y al cabo.




Menos mal que ésta época es también muy interesante para el que sabe buscar la belleza en los paseos por el campo y los bosques, disfrutar de los cambios de colorido en las hojas... y entre esas hojas... ¡sopresa!...  una seta!!!




Algunas mañanas aparecen en las praderas de cardo o en los pinares docenas de personas que buscan con fruición con la cabeza baja esos manjares hipnóticos tan codiciados... pero ¿que son realmente las setas?

Se trata del cuerpo de fructificación de un organismo muy especial que vive generalmente asociado a la raíz de una planta, en " simbiosis", o sea tomando de la planta  los hidratos de carbono y vitaminas de la raiz y aportándole a cambio minerales y agua en cantidades considerables, dado que ese organismo, el hongo, tiene a veces dimensiones que alcanzan varios kilómetros cuadrados, son algo parecido a una red interconectada de hilos (hifas) que inundan la tierra, la fijan y le dan estructura y cohesión;
es por eso que a veces las setas ( parte aérea del hongo) aparecen asociadas en hileras o "círculos de brujas".




Los hongos son una parte esencial en una tierra sana, y también son la parte mas sensible a la contaminación, por lo que son un "bioindicador" de la salud del suelo, allí donde no hay hongos el suelo está enfermo, algo raro le pasa...

¿Os habéis preguntado porqué nadie busca setas en los rastrojos de las fincas de cereal o en ninguna parcela agrícola convencional?

Es porque no los hay, no puede haberlos al aplicar abonos químicos y pesticidas que lo primero que matan son precisamente los hongos del suelo y otros seres sensibles que se dedican a algo tan fundamental como es la descomposición de la materia orgánica del suelo en materia asimilable por las raices de las plantas y posibilitan un equilibrio trófico en la cadena de la vida del suelo.




Éste modo de producción es una auténtica aberración, porque además de depender de un consumo creciente de energía fósil para el laboreo, los productos fitosanitarios y los abonos ( realmente empleamos entre 10 y 50 unidades (calorías) de energía fósil para obtener una caloría alimentaria);
las plantas al no contar con la ayuda de los hongos en su alimentación, son cada vez más y más dependientes de la acción humana y de los aportes del exterior, o sea son menos autónomas, carecen de defensas y las plagas cada vez son mas y mas frecuentes, con lo que hay que aplicar cada vez mas y mas productos químicos... es una espiral diabólica que crea cada vez mas resistencia en las plantas y animales considerados "plagas"; puede decirse que las tierras así cultivadas son auténticas "drogadictas" que necesitan su dosis cada vez mayor...




 y por tanto el día que nos demos cuenta y necesitemos volver a la fertilidad natural y al cultivo ecológico tendrán que pasar el "mono" terrible que se manifiesta con la aparición de las " malas hierbas"debido a la compactación, acumulacion de sales tóxicas, que no es otra cosa que la reacción del mecanismo natural llamado " sucesión vegetal" por el cual un suelo en estado primario ( roca madre inerte) comienza a degradarse y a posibilitar la vida vegetal cada vez mas compleja...






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